Todos los días voy a Murcia, provincia próxima a la que resido, Albacete , y desde aquí me desplazo a la provincia vecina y recorrer por diferentes pueblos murcianos...en uno de ellos, Calasparra, hay un santuario para los devotos del catolicismo, y a su vera discurre el río Segura, y cuando tengo tiempo me gusta asomarme a la ribera segureña porque está bordada de arbustos y arboleda que ilumina mi rostro y le configura una sonrisa tenue que rocía de sanidad mi mirada ante todo lo que me rodea y ante quienes me muevo o encuentro en mi día a día...un día, sin querer, encontré "mi propio santuario", humilde y recogido, formado por árboles y arbustos y conformando una especie de bóveda natural , de manera que la luminosidad y los rayos del sol penetran y tallan los propios pilares de mi hermoso y precioso santuario, el mio propio, hallado sin querer ni buscarlo por mi cuando mi corazón quería llorar de emoción y mi alma anhelaba paz de vida y amor incondicional por el mero hecho de tener que ser nada más que eso, amor...es muy bonito cómo la naturaleza hace y acondiciona sus propios santuarios, sólo hace falta mirar y verlos, sentirlos dentro en lo más hondo , están ahí para fundirse con nosotros y ser solamente vida y amor, Amor...
Rush - " The speed of love "
No hay comentarios:
Publicar un comentario